domingo, 28 de junio de 2009

Siempre Llueve aquí


Habia entrado en su habitación tan solo y tan triste... la lluvia lo mojaba y le preocupaba de sobremanera si habría trabajo en lo que quedaba del mes.

-Tenemos que encontrar como vivir si me va mal, negra.

Se sentó un rato al piano. No queria hablar de sus propias palabras pués bien sabia que siempre llovia allí y era solo de carne y hueso. Ya poco dormía y aunque nunca logró dormir bien, hoy lo notaba y el peso diario de su perdida de rumbo lo agobiaba... un día caminando por la plaza de armas vió a la chica del 404.

-Espera!!
-Ah?!
-¿Cómo estás?
-Bién ¿y tu?
-Bien, oye pasemos al Bahamondes?
-Vamos...

Su cuerpo se contorneó armoniosamente esa noche cuando se levantó a preparar un trago. "So what" de Miles sonaba firme y el contrabajo parecía desnudarle cada espacio de su percepción. De vueta ya en su cama no hubo mucho que hablar.

Otoño, Otoño. Ni sus noches ni sus despertares le retornaban la lucidez que venia perdiendo desde la adolescencia...
(Santiago, Otoño de 1959)